Un poema de emociones y delirios de grandeza

Repito sensaciones que me ponen
los pelos de punta. Disponen
de mi completa atención
e intención por la repetición

En mi cabeza de cada pieza
de amor, locura y tristeza.

Repito mis delirios de grandeza.

Esclavo de mis emociones

Me acuerdo de todo lo malo y lo bueno
para poder darme un par de palmaditas
en la espalda o justificar mi vida actual.
Busco en mi memoria esos momentos

y los reproduzco. Una montaña rusa
que me permite empujar un poquito más,
llegar a donde quiero llegar, disfrutar
y tomar todo tipo de decisiones.

Lo siento, pero sí.
Soy esclavo de mis emociones.

Scroll al inicio